#YoConfieso

...que tal vez me esté enamorando de una carita de niño escondida y una sonrisa.

I cry when angels deserve to die...

Ella es un ángel.
Uno que habla idiomas, que sabe un poco de todoy está siempre aprendiendo.
No será guapa, pero sí natural, y tiene una sonrisa preciosa perenne en la cara. No suele maquilarse, prefiere ser ella misma, sin esconderse. No será sexy pero le gusta que, a veces, la llamen guapa . Aunque sea mentira.

Ella es el más humano de los ángeles: tiene mucho genio, se pica fácil y encaja las bromas con la misma facilidad. Muerde, a veces, auque se deje morder más a menudo.
Siente una debilidad casi insana por el algodon de azucar y los libros viejos. Le late música en las venas.

Ella no será un mensajero de Dios,  pero su afán es hacer felices a los demás. Ama con pasión, ríe como loca y sueña tan fuerte que si cierras los ojos y escuchas, la oyes soñar. Y eso es mejor que ser un ángel,

Ella...solo quiere amar y ser amada...  Con eso basta,

¿Cómo puede alguien tener tánto poder para destruirme?

Una vez dije que soy mujer.
Y eso es que no olvido, aunque perdone. Aunque empiece de cero y dé oportunidades.

Incluso aunque, en una noche de locura transitoria, quiera volver a la droga de tus labios en mi boca, tus manos en mi cintura o tus mordiscos. Incluso aunque aun, en momentos de delirio, aun piense en ti. Incluso aunque aun te quiera...

No olvido el daño, las lágrimas, la soledad, la mentira y el engaño.
Fuiste mi punto de inflexión.Aquello que me hizo despertar. Y ningún tatuaje puede cambiar el hecho de que no puedo ni quiero cerrar los ojos de nuevo.

 No volverás a hacerme daño.

¿Y tu quien eres?

Soy Mar.
Y eso es que soy mujer, soy una Lady. Soy de piel, de miel, de hiel. Soy cruel, soy dulce. Soy ácido corrosivo y pura compasión. Soy una serpiente de venenosa mordida. Soy un lobo viejo que aúlla a la luna y canta al fuego.
Soy un sueño, una pluma rasgando un papel. Soy una onza de chocolate. Soy 140 caracteres, un hastag. Soy inclasificable. Soy música. Soy amiga, amante, compañera, paño de lágrimas. Soy una figurita de miga de pan, un solo de teclado. Soy una nota vacilante arrancada a las cuerdas de una guitarra. Soy una canción cortita pero intensa, de esas con segunda parte. Soy una contradicción, no me entiendo ni yo. No se quién soy, mucho menos quien puedo llegar a ser.
Pero tengo algo muy claro: sé qué no soy:
No soy una muñeca. No soy un juguete
No soy hermosa, ni quiero serlo.
No soy feliz casi nunca, soy una persona triste, pero sólo si estoy sola. Y está bien así.
No soy fría, ni calculadora. No es mi estilo
No hago nada que no me haga sentir, no abandono a quien se queda conmigo. Jamás,  y uso el infinito, traicionaré a quienes son de verdad.

Así que, "amiga", ya sabes. Ni me conoces, no sabes lo que soy, así que no inventes, no mientas, me tienes harta. Harta de ser la mala por algo que es TU CULPA. A otro perro con ese hueso.
Y ya verás qué bien en unos años, porque el tiempo pone a cada uno en su lugar...y yo se que no voy a estar muy lejos.

Libre

Chueca.
Calle Libertad.
Libertad de la que carezco, de la que todos carecemos.
Yo sólo quisiera ser libre. Libre de soñar, de vivir, de creer, de vestir, de ser. Libre de opinar y de valerme por mi misma.
Y, sobre todo, libre de amar. De amar a quien yo quiera, y que no se me juzgue. De amar con independencia de su sexo, de lo que crean. De amar y ser correspondida. De amar y no tener miedo. ¿Miedo a qué?. Al qué dirán, al rechazo, miedo de contarlo. Poder amar y no arriesgarme a perderlo todo, amar sin que sea un error, sin dudar de lo que siento, sin que me digan que estoy confusa y no se lo que quiero.
Quiero amar, joder.
Quiero atreverme, superarme, ser valiente. Quiero amar por quien se es, y que me amen por lo que soy. Que no jueguen conmigo, que no me usen.
Quiero entregarme entera y que se me entreguen en la misma medida. Quiero dar todo lo que tengo dentro, todo ese coraje oculto, cada sonrisa y cada lágrima.
Y no tener que esconderme, camuflar mi verdad para encajar.
No quiero encajar en absoluto, de hecho, si eso significa perder quien soy en aras de quien quieren que sea. No quiero ser un cordero al que los de arriba manejan como pastores.
Quiero ser yo, única y verdadera, luchadora y de piel.
Soy quien soy y no quien debería ser. Y estoy orgullosa de serlo, de haber podido superar la soledad que trataron de imponerme por ser diferente, por no ser un borrego que bala si se le ordena

Soy mi propia revolución...
..Y el amor es mi sinsajo.

Sandi (:

Una foto que lo dice todo, lo mucho que ella me quiere, lo mucho que yo la quiero.
 Lo de verdad que me siento cuando estoy con ella, mano a mano en la barra de un bar, o en un parque precioso, con una botella de tequila, y perdiendo hasta los papeles.
Y lo feliz que me siento cuando puedo pasar mis primeros minutos (horas) de libertad con ella, tiradas en el césped, cámara en mano y compartiendo risas.

Ella, que me dejó ser su celestina, que me guarda los recretos y me cuenta cada detalle.
Ella, que no se enfada si me voy y la dejo con los huevos rotos.
Ella, con la que comparto hasta las gafas, que siempre tiene una palabra de consuelo cuando se me viene el mundo encima, una palabra que me hace reir, un simple abrazo.
Ella, que es mucho más que preciosa,que convierte en mágico el mundo que ven mis ojos.




Ella, la princesa de todos los cuentos, que nunca muere en la última hoja, lucha para encontrar esa rosa...
Y yo, el castillo que guarda sus sueños, la pirata que mata sus miedos...

Ella, que es la amiga que estuve esperando, que llegó de casualidad y tomó su sitio a mi lado, que confía en mí como nadie y me da alas para volar y pinceles para pintar mis días, los grises y los de colores. Ella, que me entiende con sólo mirarme, que seca mis lágrimas y me canta al oído que yo soy su rincón favorito de Madrid y que a demás sabe que ella es el mío.


Ella, que se pasa horas a mi lado, que me fía su cámara para retratar nuestros momentos, los mejores si estamos juntas.
Ella, que es pura poesía, que escribe como nadie y es la mejor modelo.
Ella, que dice que se reserva para la mejor, sin saber que la mejor es ella misma.
Ella, que es única e increíble.


Ella... es un ángel caído del cielo, y no lo sabe.
Y yo, la adoro. 
Y todo lo que le diga es poco, porque ya lo sabe.

#TodosSomosPereza

Ayer, ocho de junio de 2012, Pereza dijo adiós, y lo dijo por todo lo alto. Fue un momento intenso, de lágrimas a mares. Y triste. Increíble, maravilloso... y sobre todo triste.

Ese momento, en pleno concierto, en el que aprendí que puedo llorar las lágrimas de la tristeza más amarga...y reir a la vez las carcajadas de mi máxima alegría. 


Las tropecientas horas de cola merecieron la pena, por la gente, por las risas...

...Por fotos como esta.

Nada como entrar con Leones, cantando que somos bichos raros

Para cuando llegó AMELIE yo ya lloraba, como si no hubiera mañana. Y es que, para Pereza... no lo había. Creo que aún no lo he asimilado, que se ha acabado esta aventura que empezó en el Siroco en 1999. 
Y entre lágrima y lágrima, canción a voz en grito y gritos porque sí, para hacer ruido y echar no sólo Vista Alegre, sino Madrid entero abajo con la fuerza de un sentimiento a flor de piel, el que nos unía en lágrimas compartidas con extraños. Y es que, sobre ese escenario, y desde la primera fila, uniendo a sus voces todas las nuestras, cámara o móvil en mano, saltando, bailando, gritando...Rubén y Leiva parecían auténticos ángeles, nuestros ángeles de la guarda.

La despedida, amarga, de toda la banda... con momentos francamente épicos

Y se remató en el bis, esta vez sin camiseta. Y con todo el Rock N'Roll que les fluye a ellos en las venas, y que resulta contagioso, con RayBan y pitillos ajustados, al más puro estilo de Lady Madrid.

Superjunkies nunca fue tan divertida, y tan amarga a la vez..

El adiós había llegado. Ver a dos de las personas que más me han motivado abrazarse y decir hasta nunca... dolió demasiado. No pude contenerme. Sólo pensaba que no volvería a oir caramelo, animales, amelie, violento amor...en directo. Y no podía dejar de llorar,

Sí, ha sido incríble, quedo marcada para siempre. lo que ha unido a tanta gente, tocó a su fin. Y ha sido todo un honor verlo.
Por lo ENORME que fue, lo mucho que disfruté, y las esperanzas que nos quedan a todos de que, algún día, vuelvan a reunirse y a reunirnos (porque, recordamos que ellos nacieron para estar en un conjunto)... Pereza es eterno, y sí, todos somos pereza, desde el principio y no hasta el final, sino más allá, mucho más allá.
Always.

Quiero dejar muy clara una cosa:
No voy a rendirme. Nadie va a poder comigo. Ya no.
Hubo un tiempo en el que era fragil, quebradiza como un cristal, y era débil, porque no me quería y me dejaba hundir. Así de niña era.
Ahora sigo siendo frágil, soy ténue como la luz del amanecer, en que aun no se ve claro por dónde sale el sol exactamente. Soy quebradiza, no como un cristal, sino como un carámbano de hielo. Pero ya no soy débil. Sonrío y sigo adelante. No me sale ser cobarde si se me encara el destino. Ya no.

Por eso quiero dedicar una entrada muy especial y curiosa hoy, a todas esas personas que me hundían a diario, que provocaron que me pasara un curso llorando en la ultima fila, sin esperanza y sin ganas de nada.
Gracias. 
Porque sin vosotros yo no estaría donde estoy, con un expediente brillante y mucha fuerza de voluntad. Queriéndome a mí misma y respetándome. Y, sobre todo, siendo lo que me da la gana ser.
Gracias a los que se alejaron de mi por mi bisexualidad, a las que lloriquearon porque las había visto desnudas y a los que me rechazaron por verme como una competencia. Porque me hicieron darme cuenta de cómo es el mundo en verdad, y sobre todo, de que me daba igual, porque no podían cambiarme.

Pero, no sólo gracias a ellos. En verdad, y sobre todo, gracias al niño de ojos azules que comparó su mirada con mi orientación sexual, restándole importancia. A los que me dijeron que me admiraban por tener valor de ser quien soy (aunque no esté de acuerdo). Gracias a quien secó mis lágrimas y a quién me devolvió las ganas de reír. A quien me pidió perdón por hundirme y me tendió la mano si necesitaba ayuda para salir. A los que se perdieron todo esto y, sin saberlo, me sacaron a empujones. A quien me colgó una pañoleta al cuello, y a quien lo hizo posible. A quién, discutiendo por tonterías, me hace cosquillas para ganar la pelea. A quien grita conmigo en noches de tequila. A quien me pone el vaso en la mano...y a quien me lo quita. A quien me mantiene en mi camino.

Porque si quien me hizo daño me hizo fuerte...vosotros me enseñáis a ser feliz
Y no tengo palabras para agradecéroslo. 

Sí, esto es un adiós.

¿De Qué vas?
Vuelves ahora por mí, después de esfumarte, después de todo el dolor, del daño, de las mentiras. Después del llanto y del sufrimiento. De repente te da por ahí y dices que me quieres. 
Y a mí... a mí me da la risa. Amarga y llena de agresividad y dolor. Pero me río en tu cara. 
Porque eres falso, todo tú. Falsa es tu sonrisa y falsos tus te quieros, tus te amos. 
Yo ya no te creo. Eso es así. Y no puedes reparar el cristal roto de mi confianza. 
No vuelvas a buscarme, no quiero saber más nunca de tí. Eres ese pasado que quiero olvidar. Y no te dejas. 
Y yo, ya no te quiero.
Ahí te jodan.

Now you want me one more time... 

And who do you think you are?

Running 'round leaving scars..

collecting your jar of hearts

and tearing love apart.

You're gonna catch a cold

from the ice inside your soul

Don't come back for me...

Who do you think you are?

Me apetece

No hay ninguna razón, más que ayer hizo, exactamente un año y cuatro meses del día en que conocí a una persona más que especial, más que importante, que ha estado a mi lado en cada momento, tragándose mis lágrimas y sacándome sonrisas. Una persona que sigue llamándome "monosa" a pesar de que no me guste. 
Y él dijo de mí al dedicarme una entrada:

para alguien especial, mucho para mi

para una persona que conoci hace algo mas de un año y en poco tiempo se convirtio en alguien muy importante para mi ,
alguien quien busco dar una sonrisa una vez mas,
alguien a quien quiero muchisimo y no quiero irme jamas de su lado,
alguien que me escucha y siempre es capaz de devolverme mi sonrisa y siempre esta ahi cuando lo necesito ,
alguien con quien sueño volar y alcanzar las estrellas y seguir hasta el infinito,
alguien que es la mejor persona que he conocido y se merece mi confianza y el universo en verso....
Mar te kiero ^-^ tu tio oscar sama nunca se olvidara de ti, no puedo olvidar los momentos tan bonitos ni tan oscuros que hemos vivido juntos, y los que nos quedan!! solo kiero que sepas que estare ahi siempre que me necesites ^-^

Y yo de él sólo puedo decir lo gradecida que estoy de tenerle siempre al otro lado de la pantalla, lo feliz que me hace que esté con mi Onee-chan y que le quiero muchísimo, porque vale su peso (y más, que es peso-pluma) en oro. Gracias, Sempai, Tito Oscar, Naoki.

Dijo Ruescas...

Los jóvenes leemos. Incluso más que los adultos. Con más fervor, con más entusiasmo. Lo que pasa es que no nos gusta que nos vean o, simplemente, no nos apetece responder a las encuestas sobre el tema. A veces lo que ocurre es que no nos preguntan a nosotros, sino a gente mayor que cree conocernos.Pero, como digo, los jóvenes leemos. Y mucho.Esperando el autobús o a los amigos; a las puertas del Metro antes de salir de fiesta o en el andén, resguardados del frío y entre gritos y risas, a veces incluso entre botellones improvisados. A veces leemos sentados en unas escaleras o andando por la calle, esquivando farolas y personas con un sexto sentido, mientras que los otros cinco se afanan por descubrir un nuevo mundo.También lo hacemos por la noche, resguardados del frío bajo la manta, con los auriculares puestos y la música a todo volumen. O con un ojo en el libro y el otro en Internet, donde compartimos nuestras citas favoritas y reacciones espontáneas. Los hay que aprovechamos trayectos en autobús o tren para apoyar la cabeza en el cristal y dejar que una novela nos robe el viaje y, a veces, hasta la parada.Algunos somos expertos en ocultar el libro bajo la mesa cuando nuestra madre entra en la habitación y cree que estamos estudiando o en la cajonera del colegio mientras el profesor habla sobre matrices y revoluciones. Si nadie se chiva, diré que en ocasiones es mucho más entretenido.Aunque nos cueste reconocerlo, hay ocasiones en las que también lloramos. Por las injusticias que les ocurren a los personajes, por los finales felices y también los tristes, porque nos sorprendemos de lo similares que son sus vidas a las nuestras. Porque nosotros sabemos de primera mano qué es que te rompan el corazón, te roben un beso o te traicionen por primera vez. Es importante llevar un boli y un papel, o el mismo móvil, para tomar nota de algo que nos guste; no en vano, también leemos para ligar, si se dan las circunstancias.A veces leemos para escapar de la realidad que nos rodea, la misma que no llegamos a entender o que, simplemente, no queremos comprender por miedo a ahogarnos. A veces lo que buscamos son respuestas a preguntas que desconocemos, que intentamos ignorar, que no nos atrevemos a hacer en voz alta. Las buscamos en secreto, para nosotros…Pero sobre todo leemos para divertirnos. No buscamos vías de escape, sino autopistas de entrada. Nos apasiona sumergimos en historias llenas de aventuras, misterio, amor y emoción. Sentir una conexión imposible de describir con criaturas y humanos que solo adquieren voz y forma en nuestra cabeza y que muchas veces resultan más reales que algunos fantasmas grises que nos rodean.Podemos aguantar las horas que hagan falta bajo la lluvia, de pie y en la puerta de cualquier establecimiento para conocer a nuestro autor preferido; hacer colas eternas para agradecerle en persona habernos hecho soñar con sus ideas y recibir a cambio un autógrafo que, para nosotros, es más valioso que cualquier tesoro pirata. Con dibujos, relatos o finales inventados, damos rienda suelta a un universo que comienza después del epílogo de una buena historia y que nos pertenece solo a nosotros.Leemos en papel y en pantalla. Leemos bajando con el ratón del ordenador o apretando las teclas de nuestro e-reader, pero seguimos prefiriendo el olor a tinta y papel, pasar las hojas con los dedos y colocar un bonito marcapáginas o un sencillo billete de tren entre sus hojas; poder cerrarlo y contemplar una hermosa portada que acariciar con los dedos.No nos gustan que nos digan dónde leer o el qué. Huimos de las historias que huelen a polvo y nos hacen estornudar tanto como de los trabajos que nos obligan a diseccionar una historia como si fuera el cadáver de un sapo. Por el contrario, nos gusta compartir y somos generosos: con ayuda de internet descubrimos y dejamos que nos descubran nuevos títulos de los que no habíamos oído hablar. Hacemos piña, jugamos en equipo y somos recelosos de aquellos que intentan engatusarnos, de aquellos que buscan aprovecharse de nosotros o burlarse de nuestra edad.Somos jóvenes, pero no tontos. Si bien podemos preferir un género en concreto -una buena historia de misterio, un romance imposible, una aventura épica…- enseguida advertimos cuándo el lobo se ha vestido de oveja para llamar de nuevo a nuestra puerta. Por mucho que algunos se empeñen en decir lo contrario, no nos cuesta nada romper barreras y rasgar etiquetas para descubrir historias diferentes.Como ya he dicho, nos encanta apasionarnos con algo -¡por ello somos jóvenes!- y no nos importa gritarlo a los cuatro vientos. No por eso tenemos menos criterio o menos gusto, no por ello leemos con menos atención o menos tiempo; más bien todo lo contrario. Hay libros que nos han abierto los ojos y que nos han hecho sentir más que cualquier película, canción o videojuego. Hay libros que nos han cambiado la vida más que muchas personas que creen conocernos. Hay libros que nos acompañarán para siempre y que nunca olvidaremos.Los jóvenes leemos en cualquier parte. Los jóvenes leemos en cualquier momento. Y es que, aunque a más de uno le sorprenda, los jóvenes leemos.

refuge.

De pequeña tenía un refugio, en el que me escondía tarde si y tarde también, al volver de clase. Como estaba sola en el salón, cerraba las puertas, reubicaba los sillones... y estaba listo. Soñaba que vivía en una residencia de estudiantes, del tipo americano, como sale en las series: esas chicas preciosas, infinitamente atractivas, con amigos, con suerte, con talento y sin problemas. Esas que visten con el uniforme de cheerleader para ir a clase.Yo quería eso para mí. No el tema pija, sino el resto. Y mi imaginación me lo traía, por un rato. En mi imaginación, sí, tenía amigos con quien pasar cada tarde. chicas como yo quería ser. Era fantástico. Solía pasearme con una vieja camisa de mi padre, de rallas azules y blancas. La misma que llevo ahora puesta, y que, aunque en su momento me quedaba enoooorme y la llevaba de vestido, ahora me queda como un guante.
La mía no fue una infancia como la de mis amigas. Ellas salían con sus madres al parque a diario... yo creo que fui con ella una vez, diez minutos, a los 11. La veía poco, trabajaba mucho. Es una luchadora, ahora lo veo con orgullo. Entonces también, no me malinterpretéis, pero tenía el regusto amargo de rabia al ver que todos mis amigos quedaban en el parque, y yo nunca iba. Me sentía apartada, pero no me importaba...demasiado. Tal vez por eso ahora soy como soy, y prefiera estar sola que con gente. Ese tipo de infancia, de ver tele (poca), leer (mucho), y crear personajes, diálogos, lugares... en los que pasar mis tardes entre los 5 y los 12 años, o tal vez más,  me hizo una solitaria. Me llevo mejor conmigo misma. No es que sea misántropa, tampoco. Pero no temo estar sola...
Ese refugio se perdió con mis tardes libres, todo a una. O tal vez fue cuando acepté que esa nunca sería mi vida, y que no podía soñar tonterías así, que no tenía siquiera derecho. No valía nada, cómo me atrevía a imaginarlo siquiera. O eso me hicieron creer. Eres fea, estas gorda, estas SOLA, no caes bien a nadie. Esa cantinela me recibía cada mañana. Me crearon complejo, claro. Se que nunca fui una miss, pero, ¿era necesario?. Se que no soy guapa, se que estoy gorda. Lo se, ¿vale?, LO SE. Y me lo siguen repitiendo: gorda. Inmadura. Crece de una vez. Ese mantra me sigue. Me lo repetía, y me lo repito, cada día, cuando me veo guapa ante el espejo.Para no creer cosas que no son. Sí, estoy muy acomplejada, pero por cosas que se que son verdades. Pero eso no le quita crueldad al hecho de repetírmelo a diario, a  la menor oportunidad.
Mi manera de vestir siempre fue objeto de burla y dura crítica. ¿Siempre?. No, siempre no. En aquel refugio, aquella residencia de estudiantes que yo cree para esconderme... allí, no. Allí me aceptaban tal cual era, tal cual soy, con mis looks raros, mi mal carácter y mis ganas casi continuas de llorar, que persisten. Con mis sonrisas falsas y mi risa estrepitosa. con la nariz fea que tengo, calcada a la de mi abuela, y mis kilitos de más. Aquella utopía me hacía sentir que valía la pena. Algo que, al abandonarla a traición, olvidé cómo se sentía.
Ahora sé que valgo, los de verdad me lo han demostrado. Que se hacer algo, aunque ese algo sea desvariar ante el teclado de un ordenador y colgarlo en la red por si a alguien le interesa.Que soy importante para alguien, quizá.
Pero hoy, sin previo aviso, mi refugio me ha abrazado, y, por un instante, solo un instante, he recordado lo que se sentía. y la sonrisa ha bailado en mi un tango con las lágrimas.

.

Y la luna, esa luna tuya y mía,esa luna nuestra, está hoy llena de vacíos. 

Y esas estrellas que alumbraron nuestra noche, hoy no sonríen. Casiopea no se peina, Andrómeda es un poco menos bella y Perseo.. No. Perseo sigue tan triste como siempre, porque no la ve.

A él le canto canciones de amor, y le susurro que ella esta cerca, tan cerca como su corazón así lo desee. Que no es necesario ver para amar...sino sólo tener fe. ¿La tiene él? . Sólo sus lágrimas lo saben...